Utiliza profesionalmente las evaluaciones DISC en la Selección, Adecuación y Desarrollo del Talento.

Certificación en Análisis Conductual DISC.

En un entorno de negocios y mercados cada vez más competitivos, las personas son el activo diferencial para lograr que las cosas sucedan. Entre otras cuestiones porque ha quedado demostrado que para garantizar el éxito en una gestión las competencias técnicas de un perfil son tan importantes como las competencias conductuales. De esta forma, los profesionales de RR.HH. hoy resultan un socio estratégico y clave en las organizaciones.

Un socio estratégico que además tiene que lidiar con todos los desafíos de este siglo: la diversidad, la convivencia generacional, las tecnologías, las nuevas formas de trabajo, etc. Por todas estas variables, entre otras, se vuelve fundamental contar con herramientas fiables y efectivas que faciliten los procesos de selección en particular y las acciones sobre la gestión de las personas en general. Es en respuesta a todas estas necesidades que Juan Daniel Fernández ha diseñado e imparte este Curso de Analista Conductual Experto en DISC para los puestos de dirección y profesionales de RR.HH.

El Modelo DISC que describíamos en un artículo anterior, y puntualmente a través de su herramienta informática: los Test DISC, permiten el análisis sistémico de grandes volúmenes de datos respecto a los indicadores de gestión que facilitan la organización, la planificación y las acciones estratégicas sobre distintas cuestiones. Veamos algunos de ellos que resultan invaluables para los profesionales del área de RR.HH.

Selección de Personal. Evaluación Persona/Puesto.

Como señalábamos al comienzo, más allá de la formación académica, es importante conocer cómo son las personas y qué los hace diferentes; cómo reaccionan ante el entorno y cómo influye el entorno en ellas. La formación como Analista Conductual permite conocer los distintos tipos de perfiles para saber que no todo el mundo vale para todo tipo de entorno, y que las personas reaccionan de forma diferente. Entonces la pregunta es, ¿qué es exactamente lo que requiere la compañía en un determinado puesto?

Y la respuesta, por supuesto, además de la description Job que define las especificaciones formativas y técnicas que tiene que tener un postulante, también define una serie de competencias conductuales acerca de cómo la empresa espera que se comporte y cómo quiere que haga su trabajo. Por ejemplo, no es lo mismo una persona orientada al objetivo a través de las tareas en la que el fin justifica los medios; que una persona orientada al objetivo a través de las personas y los equipos de trabajo.

DISC nos permite cotejar rápida y efectivamente si la candidata o el candidato encaja con el perfil definido. De esta forma, entre otras cosas, se reduce notablemente la rotación y los despidos que, en un altísimo porcentaje, no tienen relación con la capacidad técnica sino con su forma de comportarse.

Organización, planificación y toma de decisiones.

William T. Kelvin, físico y matemático británico, decía: “Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre”.

En tal sentido, DISC también se utiliza para medir, detectar, planificar y tomar decisiones respecto a muchas variables importantísimas en la gestión de las personas como la formación, el desarrollo de planes de carrera, la escucha, la empatía, la inteligencia emocional, la confianza, la comunicación, etc.; incluso permite elaborar mapas de talento de todos los colaboradores y/o áreas de mejora para identificar sus aspectos a trabajar.

Entrevistas rápidas y efectivas por incidentes críticos y evolución.

Por ejemplo, ¿cómo podemos saber si una persona ha evolucionado en el puesto de acuerdo a lo esperado? Veamos. Tenemos el Test DISC que describe como una foto inicial el perfil natural de -en ese momento- el aspirante al puesto de trabajo. Si pasados seis meses dentro de la empresa se le hace el mismo Test, rápidamente es posible identificar los cambios con la simple visualización e interpretación de dos gráficos que describen:

  • El Perfil natural es cómo nos comportamos cuando no pensamos en cómo nos estamos comportando.
  • El Perfil adaptado: cómo nos comportamos en base a lo que presuponemos que el entorno demanda de nosotros.

Como decíamos, rápidamente podemos detectar qué características conductuales ha adquirido, cuáles han disminuido o cuáles han desaparecido. Por ejemplo, si la persona ha desarrollado su capacidad de escucha, o si por el contrario la ha perdido; o si antes estaba orientado a las personas y ahora tiene una clara orientación a las tareas y paso por alto a las personas, y un largo etcétera. Visibilizar esta evolución permite a la organización evaluar qué acciones tomar en función a si ese es el perfil ha evolucionado de acuerdo a lo esperado o no, o si está dentro de los desvíos previsibles y/o reconducibles.

El respaldo en la toma de decisiones.

Los Test DISC son una herramienta de suma fiabilidad, solidez, validez y rigor científico que, además de ayudar visibilizar la contribución del área de RRHH a la organización, le permite funcionar como su socio estratégico. Todo esto gracias al aporte de datos objetivos, oportunos y concretos que eliminan la subjetividad y la aleatoriedad en decisiones de gestión que resultan vitales para el buen funcionamiento del negocio.

La formación que nos invita a ser parte de una comunidad.

Sobre todo porque el carácter vivencial de esta Certificación facilita a alumnos y alumnas conocer la metodología en profundidad y llevarla a la práctica a través de diferentes casos reales que ellos mismos acercan al espacio de aprendizaje para discutir, analizar y solucionar. Hay un caso real y curioso que compartía conmigo Juan Daniel y que mencionaré brevemente para que pueda, el lector, tomar perspectiva de lo que hablamos.

Es el caso de un despido improcedente. Hay que despedir a un colaborador -el último en incorporarse a un equipo- que se ha desempeñado muy bien y ha llegado a los objetivos. Aunque por si esto fuera poco, además de transmitirle que prescindimos de sus servicios, tenemos que conseguir que siga en sus funciones durante quince días más para terminar lo pendiente y para que no genere “ruido” en los clientes.

El desafío está dispuesto y entonces, ¿cómo lo despedimos para minimizar el impacto en la organización?

En este caso, por ejemplo, se trabaja en equipos y cada uno define una estrategia de abordaje y articula un Role Play en función a cada uno de los cuatro perfiles posibles del colaborador definidos por el Modelo: Decisión, Influencia, Serenidad, Cumplimiento. 

No revelo más porque lo cierto es que cada grupo de aprendizaje, con la misma consigna, suele arribar a soluciones efectivas y creativamente diferentes. Y, en definitiva, esa es la idea.

Metodología DISC ¡Entiende cómo funcionan las personas!

Experto y Analista Conductual Experto en DISC.

Los líderes de la organización son el engranaje de todas las personas, relaciones, actividades e instancias que se desarrollan en una compañía. De esta forma, mientras un liderazgo sordo e indeciso sólo tiene consecuencias nocivas, un liderazgo que se ejerce desde la ejemplaridad y la influencia positiva se contagia, se expande y se multiplica en todas las direcciones de la organización. El Modelo DISC, creado por William Marston, lleva décadas siendo utilizado, entre otras cosas, para desarrollar ese tipo de liderazgo ejemplar en las empresas.

Básicamente porque nos permite entender el comportamiento humano y capitalizar la riqueza de la diversidad. Es decir, nos facilita identificar el perfil conductual de una persona para saber cuáles son sus necesidades, qué les gusta, qué les motiva, qué esperan y, desde este entendimiento, saber cómo dirigirles, cómo motivarles, cómo comunicarnos eficazmente con ellos e, incluso, predecir cómo se van a comportar ante ciertas situaciones. Dicho de otra forma, nos permite entender qué necesitan para funcionar mejor. Como dice Juan Daniel Pérez Fernández, nuestro experto en DISC: “las personas somos diferentes, pero somos predeciblemente diferentes”.

De esta forma el modelo DISC define 4 estilos predecibles de comportamiento:

  • Decisión: cómo respondemos a los desafíos y a los retos.
  • Influencia: cómo nos relacionamos e influimos en los demás.
  • Serenidad: cómo respondemos al ritmo y los cambios del entorno.
  • Cumplimiento: cómo respondemos a las reglas y procedimientos.

Esta información puesta a disposición de líderes de gestión, directivos y mandos intermedios resulta invaluable. En particular, esta Certificación Internacional Experto y Analista Conductual DISC(1), a través de dos jornadas presenciales que combinan conocimientos teóricos sobre la metodología y prácticas vivenciales, apuntan a profundizar en el autoconocimiento y la autogestión del líder para que luego sean capaces de sintonizar e influir positivamente en los demás y, con todo ello, puedan facilitar y contribuir a la construcción de ecosistemas laborales saludables.

Ahora bien, ¿cómo es posible que este círculo virtuoso ocurra? Veamos. Como mencionábamos con antelación, trabajando primero con uno mismo. Por ejemplo, podría ahora mismo el lector intentar identificarse con uno de esos 4 estilos, aunque en la mayoría de los casos resulta difícil encasillarse sólo en uno de ellos. Esto no es casual. Se debe a que todos -sin excepción- tenemos esos 4 estilos en distintos niveles, aunque uno de ellos predomina por sobre los otros; es ese lugar que habitamos con más frecuencia, comodidad y soltura.

No obstante, DISC nos invita a profundizar en él, a conocer nuestras áreas de mejora y a explorar otros estilos para ampliar nuestros patrones de acción, para adaptarnos más naturalmente, para comunicarnos mejor y para entender el cómo de las personas.

Por ejemplo, DISC nos revela qué puede aportar cada persona en cada equipo. Es decir, hay personas muy orientadas a las metas que no le dan tanta importancia a los proceso para llegar a ellas; otros, se enfocan en las personas y en las relaciones y las priorizan por sobre los sistemas; algunos, consideran más importante el cómo llegar al objetivo por sobre el objetivo mismo; mientras que a otros tantos, el cumplimiento de las tareas les hace pasar por alto a las personas. Este conocimiento le permitirá al líder adoptar soluciones adaptativas según la complejidad de la tarea/proyecto y adecuar los perfiles de acuerdo a ello.

No obstante, otra característica que cabe mencionar con respecto a la Metodología DISC es que no hay perfiles buenos o malos, mejores o peores; es decir, todos tienen sus particularidades y cada resultado es información certera acerca de fortalezas que potenciar y debilidades que mejorar. Por ejemplo, si un Test DISC nos arroja como resultado un perfil Dominante muy marcado, entonces, seguramente tendremos que trabajar en aspectos como la escucha activa y la empatía. ¿Por qué? Porque cada perfil también tiene asociada una emoción predominante que, bajo estrés, tiende a manifestarse de forma exacerbada.

A grandes rasgos, sería algo así:

D => Ira.

I => Exceso de optimismo.

S => Ocultan su emocionalidad.

C => Miedo a las críticas (necesidad de reconocimiento por el trabajo bien hecho).

Por lo dicho, entre un sinfín de combinaciones posibles que puede tener cada perfil, podremos saber, por ejemplo, si se trata de alguien decidido, rápido, enfocado y a veces un tanto agresivo; alguien tranquilo, trabajador, estable y un poco inseguro; alguien optimista, sociable, innovador y algo soñador, o bien de alguien analítico, concienzudo, calculador y un poco temeroso.

Los líderes, al finalizar esta formación serán capaces de:

  • Optimizar su comunicación intra e interpersonal.
  • Sacar el máximo potencial a su estilo de comportamiento.
  • Aprender a influir positivamente en los demás.
  • Romper barreras de relación y resolver conflictos.
  • Utilizar el sistema más efectivo para comunicar, enseñar, liderar y motivar.
  • Aprender el uso profesional de las evaluaciones DISC.

Para la empresa, los beneficios son múltiples; entre ellos:

  • Mejorar la comunicación en todos los niveles de la compañía.
  • Minimizar los conflictos y mejorar su gestión.
  • Aumentar el rendimiento, el compromiso y el bienestar de las personas.
  • Promover valores de empresa que se replican en todas las direcciones dentro de la empresa y hacia fuera (clientes, proveedores, etc.).

DISC es una metodología que deriva de una teoría validada científicamente y de la cual se desarrolló posteriormente una herramienta en formato test que ha demostrado ser decisiva en el mundo del desarrollo personal y profesional. Entre otras cosas porque nos permite cambiar la regla de oro que señala “trata a los demás como te gusta que te traten a ti”, por la regla de platino que indica: “trata a los demás como ellos prefieren ser tratados”.

Sólo por este nivel de entendimiento resulta una metodología fundamental para el liderazgo y la selección de personal y para otros ámbitos que incluyen el encuentro con el otro como el coaching, la educación, la consultoría, las ventas, etc.

(1) Certificación avalada por el International DISC Institute. Entidad sin ánimo de lucro que se encarga de velar por la calidad de la formación y de las evaluaciones y de la difusión de la metodología DISC a nivel mundial.

El espíritu del liderazgo: los cuatro cuadrantes del cambio.

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The Leadership Circle.

El espíritu del liderazgo.

El 85% de los intentos de cambio fracasan…¿es posible el cambio real? Extracto de la traducción del artículo “El espíritu del Liderazgo” de Bob Anderson, fundador de The Leadership Circle. 

Un estudio reciente sobre más de 100 empresas comprometidas con esfuerzos para el cambio, demostró que el 85% no consiguen resultados tangibles y mucho menos sostenibles. ¿Por qué?

¿Podemos mejorar ese 15% de porcentaje de éxito? Nuestra respuesta es sí, pero sólo si manejamos el cambio de una manera integral enfocando tanto las demandas internas como las externas. El éxito es posible, solo si estamos dispuestos a:

  • Experimentar la misma metanoia (cambio fundamental de mente y corazón) que queremos para nuestras organizaciones.
  • Comprometernos con el difícil continuo diálogo que saca a la superficie todo lo que está oculto en nuestra cultura y que permite que la transformación personal se traduzca en un cambio cultural y sistémico.

El reto del liderazgo en el nuevo milenio es enorme. Einstein lo deja claro: “Los problemas significativos a los que nos enfrentamos no pueden ser resueltos al mismo nivel de pensamiento al que estábamos cuando los creamos”. Algo en nuestra consciencia debe cambiar para que podamos ver cómo actuar en una manera que pueda dirigirse a los retos de este tiempo.

De lo que trata el liderazgo.

The Leadership Circle (TLC) se dedica a preparar líderes capaces de manejar el delicado equilibrio entre los beneficios a corto plazo y el bien común a largo plazo; líderes preocupados por crear un futuro próspero y sostenible para este planeta y, de este modo, para los negocios a nivel global.

Nosotros creemos que el liderazgo corporativo está en el asiento del conductor. Mientras que el cambio global, en última instancia, requiere poder y deseo político, el poder detrás de la agenda política, hoy en día, es corporativo. El liderazgo corporativo establecerá la agenda para el futuro del planeta. Es tiempo de que nosotros expandamos nuestras nociones de legado, más allá de la creación de una gran empresa, a crear un legado para el bien global.

Sin duda, las organizaciones que creamos deben llegar a ser grandes organizaciones. Pero, estamos listos para una definición expansiva de la grandeza. Está definición incluye retornos sostenibles de dinero y significado. Es la grandeza lo que beneficia accionistas y el entorno, lo que consigue avances en el servicio, en la tecnología y en las vidas de aquellos que están asociados con la empresa.

The Leadership Circle está dedicado a expandir nuestra manera de medir la grandeza y no sabemos donde residen los límites. Es la visión de TLC que, a través de orquestar profundas experiencias de aprendizaje y grandes conversaciones entre los niveles más seniors del liderazgo y los más grandes teóricos del mundo, podamos convertirnos en líderes capaces de afrontar los retos globales a los que nos enfrentamos.

¿Por qué fracasan los intentos de cambio?

¿Por qué tantos intentos de cambio se quedan cortos? La verdad es que, el cambio sistémico es extremadamente complejo, y no hay una causa, ni un antídoto, a estos preocupantes resultados. No obstante, la mayoría de infructuosos intentos de cambio que hemos estudiado, revelan un patrón común, mirados de cerca: hay variables cruciales que están siendo ignoradas. Normalmente, los aspectos del cambio a los que resulta más fácil y obvio dirigirse, ya son abordados. Los cuadrantes más invisibles, insidiosos, emocionalmente dolorosos del cambio personal y cultural son, muy a menudo, dejados fuera de la ecuación.

Para que ningún esfuerzo de cambiar sea fructífero, debe dirigirse a cada uno de los cuatro cuadrantes mencionados abajo.

Adaptado del trabajo de Ken Wilber
Los cuatro cuadrantes del cambio.

Cuadrante 1: Es el aspecto individual e interno del cambio. Esta es la realidad interior de las personas. Es el área del desarrollo psicológico, espiritual y cognitivo. En este cuadrante, los líderes atienden al desarrollo interno de la persona, reconociendo que ningún cambio sustancial es posible sin un previo cambio en la consciencia.

Cuadrante 2: Tiene que ver con los aspectos individuales y externos del cambio. Es el territorio de las habilidades técnicas e interpersonales además de la ciencia del máximo rendimiento (fisiología / neurología / psicología). Este cuadrante tiene un gran grado de atención de los entrenadores y atletas de categoría mundial. Es donde se presta atención a desarrollar las habilidades de la persona y a apoyar los ingredientes físicos y fisiológicos que son la chispa de la motivación y del máximo rendimiento.

Cuadrante 3: Trata con los aspectos colectivos e internos del cambio. Este es el territorio de la cultura. Es el territorio interior, a menudo oculto, de nuestras imágenes y suposiciones compartidas que dirigen lo que pasa cuando estamos juntos. Es el dominio de los mitos, de las historias, las normas no escritas y las creencias. Recuerda a los líderes que deben prestar atención a los significados más profundos de los símbolos, propósitos, visiones y valores -no tanto como afirmaciones, escritas, enmarcadas-, sino como sutiles mensajes encriptados de nuestras interactuaciones diarias.

Cuadrante 4: Tiene que ver con los aspectos colectivos y externos del cambio, el sistema social-técnico-organizacional. Es el cuadrante del diseño organizacional, del proceso de trabajo de la tecnología, de las políticas y de los procedimientos. Este cuadrante recuerda a los líderes que el diseño del sistema determina el rendimiento y que si queremos que el sistema rinda a un nivel sustancialmente más alto, debemos diseñarlo para ello.

Cada uno de estos cuadrantes está relacionado con todos los demás. Cada uno es poderoso. Ignorar alguno de ellos puede llevar a resultados desordenados o caóticos de nuestros intentos de cambio. Cuando intentamos cambiar un sistema organizacional complejo, es necesaria una aproximación al cambio desde el punto de vista de todos los cuadrantes. En TLC llamamos a esto una aproximación integral.

Por todo ello, es posible mejorar ampliamente el porcentaje de éxito del 15% en el cambio organizacional. Pero sólo si los líderes están dispuestos a meterse en las áreas del cambio que son típicamente evitadas o no observadas. 

Con la metodología y evaluaciones de The Leadership Circle, se pueden desvelar y abordar esas áreas “no visibles”, esos cuadrantes internos individual y colectivo, variables cruciales, que nos permitirían esa aproximación integral al cambio.

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The Leadership Circle: creando un liderazgo más efectivo para tus clientes.

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The Leadership Circle.

Creando un liderazgo más efectivo para tus clientes.

“Debemos acelerar el ritmo al cual desarrollamos líderes para abordar la complejidad a la que nos enfrentamos en el entorno de organizaciones. El ritmo de desarrollo debe ser como mínimo el mismo ritmo del cambio y complejidad. Esta es la Agenda del Liderazgo a la que la mayoría de las organizaciones se enfrentan”. Así lo afirma Bob Anderson, Fundador y CEO The Leadership Circle.

The Leadership Circle (TLC) ofrece la primera metodología para el desarrollo de liderazgo que integra el desarrollo de las competencias con la evolución de consciencia. Dentro de este marco, consciencia y competencia emergen juntas para poder crear un liderazgo más efectivo.

En tal sentido, una de las metodologías para ello y que significa un auténtico avance de los perfiles 360º es The Leadership Circle ProfileTM, pues conecta una batería de competencias muy contrastadas de liderazgo, con los hábitos de pensamiento subyacentes. En última instancia, va a la fuente del comportamiento, para desde allí impulsar un cambio transformador y sostenible.

Y el único cambio transformador y sostenible es el que sucede, en primer lugar, en primera persona y ocurre desde dentro hacia fuera. Por supuesto, es el que también nos permite tomar consciencia sobre aquello que queremos cambiar; Carl Jung decía: “No podemos cambiar aquello que no conocemos o aquello de lo que no somos conscientes”. No hay otra forma y así lo entiende la Certificación Leadership Circle ProfileTM.

Efectivamente, esa relación entre los comportamientos y las suposiciones internas que los rigen, también está avalado por la neurociencia. Al efecto, numerosas investigaciones han concluido en que todos nuestros comportamientos se originan en el cerebro. Nuestras acciones y decisiones están condicionadas por nuestras creencias o modelos mentales; son juicios, opiniones, creencias -limitantes o no- muy arraigadas que se forman en el pasado, viven en el presente y condicionan nuestro futuro.

Por todo ello, TLC, en vez de preguntarse qué hacen los líderes -un enfoque centrado en las competencias-, se enfoca en el cómo piensan y cuál es la mentalidad que les permite ser más efectivos. Les informa sobre lo que contribuye o no a la efectividad de un líder y por qué. En cierto modo es una metodología reveladora, pues nos muestra la mentalidad y los patrones de pensamiento de forma clara, impactante y, la mayoría de las veces, sorprendente.

El objetivo es aumentar la consciencia, para cambiar nuestro comportamiento.

Ciertamente, The Leadership Circle ofrece evaluaciones de liderazgo únicas que mide los dos ámbitos principales de liderazgo: las Competencias Creativas (supuestos internos que llevan a un liderazgo pleno y exitoso) y las Tendencias Reactivas (supuestos internos que limitan la efectividad, la expresión auténtica y el liderazgo empoderador), e integra esta información de forma que las oportunidades clave de desarrollo emergen a la superficie inmediatamente.

A partir de conocer nuestro estado actual, de tomar consciencia de nuestras eficacias y limitaciones, de nuestras debilidades y fortalezas, de nuestras carencias y necesidades, se nos abre la enorme posibilidad de actuar para cambiar lo que ya no funciona y a trabajar sobre todos aquellos aspectos que requieran desarrollo, mejora u optimización.

Una Certificación que transformará la efectividad de tu coaching.

Esta metodología no sólo permite acompañar a una persona desde el punto “A” hasta el punto “B”, sino que suma valor, consciencia, autoconocimiento, responsabilidad y calidad en el proceso, porque permite diseñar el cómo, el con qué y el para qué se llega desde el estado actual, al estado deseado.

Esta Certificación Leadership Circle ProfileTM permite, entre otras cosas:

  • Aplicar la metodología y evaluaciones en procesos individuales.
  • Obtener mayor efectividad y capacidad para profundizar en menor tiempo.
  • Conectar competencias y comportamientos con resultados, lo que permite mostrar a las personas una conexión sólida entre sus posibilidades de cambio y sus beneficios.
  • Aportar mayor claridad y dirección a las sesiones.
  • Sumar valía profesional y valor curricular.

La primera teoría unificada The Leadership Circle tiene en la base de su metodología las mejores teorías e investigación en el campo de Desarrollo de Liderazgo, Psicología, Desarrollo de Adultos y Espiritualidad, de las últimas décadas. Conformando así, la primera teoría unificada para el desarrollo de liderazgo.

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LEGO® SERIOUS PLAY® Method para empresas.

Construir; dar significado; armar una historia.

“El proceso de creación es un proceso de entrega y no de control”. Así lo afirma la famosa novelista americana, Julia Cameron.

Nadie nos enseña a jugar. Jugar es una experiencia personal e intransferible. Probablemente, la primera vez que tuvimos las piezas de Lego delante ni siquiera sabíamos cómo encajarlas con precisión o cómo seguir una lógica para copiar un prototipo y aún así era divertido, pues despertaba nuestra curiosidad y nos permitía dar rienda suelta a nuestra imaginación y creatividad. Compartirlos con amigos era igual o más divertido; nos enseñaba a colaborar, a participar y a crear historias compartidas. Aprendíamos haciendo.

Y el hecho de que ya no seamos niños nos vuelve a la idea de que ya no podemos jugar, simplemente, porque creemos -equívocamente- que “jugar es para niños”. Bernard Shaw, en tal sentido, decía:

«No se deja de jugar porque se es viejo, sino que se es viejo porque se deja de jugar”.

Ciertamente, cuando los adultos nos permitimos jugar, dejamos de lado el ego y los prejuicios. A cambio, nos dejamos llevar por el niño interior, por el que disfruta de sus emociones sin censura y actuamos desde nuestro lado más genuino. En ese contexto, el juego es un disparador de emociones y por eso nos sirve para fijar experiencias y conocimientos; este concepto lo han entendido muy bien grandes compañías como Google o Coca-Cola, que utilizan LEGO® SERIOUS® como herramienta potenciadora de innovación y creatividad.

En cierto modo, la “mano de obra” del siglo XXI parece girar en torno a la innovación y la creatividad y, de hecho, son dos de los mayores desafíos a los que se enfrentan directivos y líderes de gestión en la empresa de hoy. Sin embargo, no existe el ADN creativo o innovador. Lo más importante para que estas habilidades puedan desarrollarse (y sostenerse en el tiempo) es crear los espacios para ello y encontrar las herramientas para favorecerlas.

Al efecto, construir los modelos e ideas que tenemos en el interior y ponerlos en el mundo exterior -en forma de metáfora- para verificar cómo se comportan, que es lo mismo que hacen los niños cuando juegan. Se trata de una de las herramientas más poderosas para la generación y comunicación de ideas, que además se sostiene en las revelaciones de la neurociencia respecto a la íntima conexión que existe entre el cerebro y las manos para la comprensión del mundo.

Efectivamente, cuando esta metodología se convierte en la herramienta de un equipo y de un reto particular, sus integrantes se comprometen y cooperan entre sí para alcanzar determinados objetivos de negocio. Incluso, durante el juego, los participantes suelen asumir roles diferentes de sus funciones habituales y esto ayuda a ponerse en el lugar del otro, a detectar habilidades individuales y/o conjuntas y a pensar más abierta y creativamente para resolver situaciones.

Por ejemplo, en cualquier reunión tradicional de equipo llevada a cabo para tomar decisiones sobre un proyecto nuevo o un relanzamiento de producto, lo habitual es que muchos participantes se inhiban de hacer aportaciones. De alguna forma, esto significa que gran parte del conocimiento y de las ideas no han sido manifestadas y así la toma de decisiones estará, cuanto menos, supeditada a ser “más de lo mismo”.

Ahora bien, cuando en ese mismo escenario se utiliza la metodología LEGO® SERIOUS PLAY® emerge naturalmente todo el conocimiento tácito o no expresado y queda reflejado en las construcciones. Ciertamente, como los modelos construidos responden a la parte más genuina de los participantes, será posible sorprendernos descubriendo lo que no sabíamos que sabíamos y conociendo aspectos (propios) y de otros miembros del equipo que permanecían “en la sombra”.

El método nos acompaña para que experimentemos con el modelo compartido.

A imaginar y probar diferentes escenarios y observar lo que ocurre; a jugar hacia posibles futuros; a extraer conclusiones, a visualizar estrategias, a elaborar planes de acción y a configurar guías de actuación que nos mantengan cohesionados. En definitiva, a tomar decisiones con claridad e inteligencia.

En este sentido, a través de workshops 100% experienciales, la metodología LEGO® SERIOUS PLAY® es aplicable en retos muy diversos y en el ciclo completo de cada uno de ellos (desde la idea, a la acción y hasta su aplicación).

Algunos de ellos son:

  • Ideas de negocio.
  • Innovación en productos y/o servicios.
  • Educación.
  • Presentación de modelos de negocio.
  • Identidad de equipo. Identidad y cultura corporativa.
  • Misión y valores.
  • Estrategia y objetivos.
  • Áreas de mejora.
  • Segmentación de clientes.
  • Fusiones de empresas.
  • Selección de personal.

Panxo Barrera, experto en creatividad e imaginación aplicada, CEO de Entropía: Inteligencia Creativa y facilitador de la metodología LEGO® SERIOUS PLAY® asegura:

“Jugar es una manera innovadora de aprendizaje: promueve la creatividad, facilita la comunicación, es una dinámica positiva y colaborativa, genera compromiso y participación de todo el equipo. Permite construir, visualizar escenarios, contar historias”.

#Reinvéntate

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